miércoles, 20 de abril de 2011

Si eres un triste titere siempre te caen los pies al suelo…

… y titeres en Marca hay más de uno. A esos si se les caen los pies, y los brazos, y la cabeza al suelo, cuando ya no son de utilidad al titiritero.

Mientras tanto, mira, mira como bailan. Mira que locuras hacen.

Si es que no son muñecos de ventriloquía, con el brazo del que paga y manda metido por detrás hasta el cráneo, su mano moviendo los labios, y, por detrás, la voz disimulada del amo de las marionetas, poniendo palabras en los labios del muñeco. Y después, al baúl.

Mientras tanto, mira que porrazo, mira que colorines. Mira que tonterías dicen.

Son muy divertidas las marionetas. Cuando eres niño.

Después se hacen un poco más amargas. Cuando piensas en muchas de las historias que cuentan y lo que llevan detrás. Las historias del guiñol clásico son bastante truculentas en el fondo y, por lo general, con moral poco recomendable.

Hay otra clase de cuentos. Otra clase de historias. No las representan marionetas.

Algunos de esos cuentos son verdad.

Otros son mentira.

Hoy. Mañana, pueden llegar a ser verdad.

Y no porque esos cuentos se repitan y repitan hasta que creen surcos en las cabezas de la gente.

Sino porque hay gente que los sueña, los vive y los crea, no porque nos digan el mundo como es, sino como debería ser.

Esos cuentos son mentiras. Cierto. Pero son mentiras con vergüenza de serlo, son mentiras con honor. Son mentiras que intentan merecer, e inspirar, verdades.

Pero esas no salen de la boca de las marionetas del guiñol de Marca. Lo que salen son peleas, polémicas, conspiraciones, odios, inquinas, envidias, banderas, guerras, humillaciónes… gente que escupe y apuñala por la espalda, gente que roba y difama, que hace trampa y compra voluntades y resultados, estrellas que se supone vienen por muchos ceros -o no-, y que marcan muchos goles -aunque los hagan otros-…

No soy yo quien decide si son verdad o mentira. Que lo sea o no, es para investigadores, jueces, policías, forenses y similares.

A mi me es indiferente. Aunque fueran verdades, no las creo. No se lo merecen.

Puestos a creer, prefiero creer cosas que valen la pena.

miércoles, 13 de abril de 2011

Una camiseta con mensaje

A cuento de la iniciativa:

http://www.superdeporte.es/valencia/2011/04/12/camiseta-mensaje-recibir-real-madrid/125009.html

Que pondría a la plantilla del Valencia una camiseta especial durante el partido de Copa del Rey.

Propongo cuatro diseños (y perdón por la mala leche casi nada disimulada):

Como no podía ser de otra manera.
Mou, no tienes... lo que hay que tener para sacarlo.

Bueno, si que lo tienes, aunque sea fuera de lugar.
Como tercera propuesta, algo que le hará ilusión a Mou.

"Con el Barça siempre en el corazón."
Para que veas que nos acordamos de ti y de todos los buenos ratos que nos haces pasar.
Claro que no descarto que la tenga ya... y firmada por Maradona.
Y mira que si el último día de entrenador del Madrid hiciera la rueda de prensa con ella puesta...
Eso si que sería peor que la manita.
Yo que creía que eso de la manita ofendía.
Pues si que han cambiado las cosas.
Claro que "manos blancas no ofenden"
Y lo mismo nos la devuelven. 
Cuatro oportunidades este mes hay, que se dice pronto.

Mucha suerte a todos y que puedan llegar a jugar lo mejor que saben.
En el caso de Milito, basta que llegue a jugar. 
En el caso de Dudek, además de jugar, a llegar al balón. 
Piqué: a llegar al balón pero con los pies por favor
Khedira, no se si sabe llegar. O jugar. 
Por mi, que llegue, pero al banquillo y no se mueva de allá.
Messi, Villa y Pedro, que se acuerden de chutar a portería.
Pepe, que se acuerde de que esto no es la WWF.
Valdés que se acuerde de que viene a jugar y no a abrir la boca.
Para desbarrar ya tenemos (ex)presidentes.

Y Mou... a él si es posible que lo veamos desbarrar. 
Y hablar más de la cuenta, y conspirar, y perder el respeto. 
Malo para la imagen del club, pero buena señal para el madridista si lo hace. 
Porque solo lo hace cuando gana.

martes, 5 de abril de 2011

A vueltas con la épica

En mi comentario de la portada de hoy, me refería a la frase "vuelve con tu escudo o sobre él" como romana, cuando es espartana.

Me confundi porque una vez me contaron del poeta romano Horacio que cuando era soldado, en lugar de presentar batalla tiró el escudo al suelo y salió por piernas. Si es probable que el dicho fuera conocido en Roma, por influencia de los griegos.

Pero fallo es.

A cuento de esto y de la referencia que se desprende de la corrección, Leónidas y los espartanos en la batalla del paso de las Termópilas, popularizada por la película ‘300′, quiero entrar en un punto que me parece importante.

Estoy empezando a estar hasta las narices de las referencias épicas al Real Madrid en Marca. O al Barça en Sport. A las "tremendas batallas", las "remontadas" y lo que cuesta vencer. A la "épica".


No es de recibo. No cuadra.

La épica es otra cosa.

Es el enfrentarse al orden establecido, es la historia del oprimido, del marginado, del héroe solitario.

Lo que es épico es que llegue el Alcorcón o el Numancia y con un par le planten cara a los mejores equipos de España. Que el Villarreal haya conseguido pasar de la nada a Europa en unos pocos años.

¿El Real Madrid enfrentandose al Tottenham? Puede ser muy buen fútbol. Puede ser uno de los mejores partidos de la historia del deporte.

Pero no estamos hablando de un equipo pequeño en situación de desventaja.

No son Leónidas y sus espartanos contra los persas.

Son Rambo, Terminator, el pitufo de Avatar y Guybrush Threepwood armados hasta los dientes.
Y Pepe. También juega Pepe. Que por lo que tengo entendido también está armado hasta los dientes y no sólo metafóricamente.

A mi que me digan: que desventaja tiene que superar un equipazo como la copa de un pino, sin duda uno de los tres o cuatro mejores equipos del mundo. Con una plantilla de impresión, un señor entrenador y un presupuesto que ya querría para si la liga de fútbol irlandesa entera.

No son los espartanos.
Son los persas.

El Barça también. Y más. Pep hasta me recuerda al general ese persa calvo.

Que no me vendan la épica victoria del Madrid. O la del Barça. Ahora no.

Se puede disfrutar con su fútbol, con sus victorias y con su saber hacer, pero no hay épica para ellos. Hay otras cosas.

Pero épica, no.

Educación primaria

Querido Mou,

Hoy te toca clase, de primaria.
Primaria de fútbol.

Un ejercicio.

Sumas y restas:

Real Madrid
- Khedira
- Kaká
- épica
- primadonnas
- chulerías

+ Granero
+ Özil
+ cantera
+ compañerismo
+ trabajo
+ respeto al rival

= ?

Y la solución, para que no la tengas que buscar en Güiquipedia:

=
+ títulos
+ éxitos
+ deportividad
+ fútbol

En resumen,

=
+ Real Madrid

¿Todo claro?

A ver si es verdad.


P.D: No es que tampoco me guste Granero, pero es cien mil millones de veces mejor que las alternativas que está Mou dispuesto a sacar.

P.P.D: Y para bonus points, es evidente:

+ Dudek :-)

Portada del 5-4-2011


"Volved con vuestro escudo o sobre él", decían las antiguas madres y esposas romanas a los soldados que partían a la guerra contra los bárbaros, que era cómo se llamaba entonces a todo extranjero.


Esta frase no se podría aplicar hoy día al Real Madrid.


Primero, porque los locales son minoría. Por contra, el grueso de la tropa está formada por mercenarios allóctonos: lusitanos, númidas, germanos y hasta algunos venidos de lejanas tierras de ultramar, que no tenían nombre en aquellos tiempos.

Segundo, porque mucho ha llovido desde entonces. Aunque todavía hay guerras y no tan lejos de nuestras casas, nuestras interacciones con los foráneos son pacíficas y relativamente incruentas. Los enfrentamientos se limitan por lo general a lo deportivo (corramos un tupido velo sobre lo musical)

O tempora, o mores. Como en tiempos de los moros..., perdón, quería decir... los tiempos cambian.

Tercero, también por que los tiempos cambian, hoy tampoco son las madres y las esposas las que despiden a los "guerreros" que marchan a conquistar la gloria, sino los coloridos estandartes de la prensa deportiva.

Actores contratados, aclaman por dinero a los soldados que van a la guerra un día y hacen de plañideras sobre sus cadáveres el siguiente si hace falta.

Pero en el caso de Marca, no se trata de vitoreadores o plañideras.

Su juego es otro.



Son buitres.


Y como suelen hacer estas aves carroñeras, si la presa da muestras de debilidad, le picotean los ojos hasta que caiga.

Hoy, le roban el reloj a Cristiano y lo venden en la plaza pública. Lo siguiente será la cartera, si es que no se la ha robado ya algún jugador del Tottenham.

Hoy, se va a un partido de Champions con lesionados y sancionados. Incluso juegan algunos que no son ni una cosa ni la otra, pero tendrían que estar también en el banquillo. ¿Esta es la profundidad de una plantilla que ha costado cientos de millones obtener y de una cantera que se supone que no tiene nada que envidiar?

Hoy, la gran atracción es el marcaje de Carvalho a Crouch. No esperan ya de la plantilla ni goles. Tan sólo morir con las botas puestas. Aunque lo mismo también se las han robado para venderlas en la plaza pública.

Hoy, la Décima o la vida. ¿Esperan que que los jugadores del Madrid se hagan el seppuku,- el mal llamado harakiri- en caso de perder? Esto es hasta comprensible. Tendrían entonces vísceras de sobra para su banquete.

Preferirían supongo las del Barcelona, pero como no da síntomas de debilidad, se conforman defecándole encima desde la impunidad que dan las alturas.

Retorciendo las declaraciones de un grande del barcelonismo -aunque también sea él amante de meter cizaña de cuando en vez- en las que resalta que el Shakhtar es en principio un rival más duro que el Tottenham, lo convierten en que "duda con el Barcelona".

Ese siempre dudoso Barcelona. Con sus goles dudosos, victorias polémicas y rivales sorprendentemente fáciles. Siempre sembrando la duda, porque la duda ofende.


Los buitres son una especie en peligro de extinción, para la que hay reservas y protecciones especiales.


No tendría inconveniente en que las hubiera para este tipo de prensa, si también estuviera en peligro. Pero no es ese el caso. La falta de predadores ha hecho que su número se dispare.

En estas situaciones, los gobiernos normalmente autorizan soluciones extraordinarias para restaurar el equilibrio natural.

Propongo lo mismo.


Que levanten la veda del buitre ya.